En un contundente mensaje, el dirigente de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia (CSCIB), Vidal Gómez, ha afirmado que en las próximas elecciones del país no habrá espacio para los “dedazos” en la selección de candidatos. Esta declaración resuena en un contexto donde la imposición de candidatos designados directamente por líderes políticos ha generado descontento y rechazo en diversas regiones.
Gómez, durante la entrega de la convocatoria para el X Congreso Nacional del MAS-IPSP, evento organizado por el Pacto de Unidad en la ciudad de El Alto, enfatizó que esta vez no permitirán que se “torza el brazo” a sus decisiones. Recordó cómo en el pasado, específicamente en el año 2020, la vuelta de Evo Morales al país llevó consigo una serie de imposiciones de candidatos que resultaron en derrotas para el MAS-IPSP en las elecciones subnacionales.
La resistencia a los “dedazos” no es una novedad. En 2020, al menos cinco regiones mostraron su desacuerdo con este método de selección de candidatos. En Colcapirhua, Cochabamba, y Betanzos, Potosí, entre otras localidades, la imposición de candidatos designados directamente por Morales provocó rechazo y protestas. Incluso en El Alto, la candidatura de Eva Copa fue vista como una respuesta al intento de influencia desde arriba.
Este rechazo a los “dedazos” ha encontrado eco incluso entre las altas esferas del poder. El presidente Luis Arce ha expresado su posición en contra de esta práctica, destacando la necesidad de una renovación y una mayor participación en la selección de candidatos dentro del Instrumento Político.
En conclusión, la declaración de Gómez y la oposición generalizada a los “dedazos” marcan un cambio significativo en el proceso electoral boliviano. Los sectores interculturales y diversos segmentos de la sociedad están decididos a no permitir interferencias externas en la elección de sus representantes, buscando así fortalecer la democracia y la legitimidad de los futuros gobernantes.
(Ahora el Pueblo)